En el marco de la Jornada Nacional de la Juventud, nuestros hermanos capuchinos vivieron una experiencia enriquecedora junto a los jóvenes participantes. Por la mañana, compartieron su testimonio de fe y vocación, celebrando la Eucaristía y experimentando la alegría evangélica de ser llamados a una nueva vida en Cristo.





Por la tarde, nuestros hermanos continuaron su labor de pastoral vocacional, compartiendo con los jóvenes la belleza de la vida capuchina y el seguimiento de San Francisco.
En esta última noche de encuentro, nos unimos en oración por todos los jóvenes que participan en la vigilia de adoración al Santísimo, para que puedan encontrar en sus vidas el amor y la guía del Señor.




