Clara de Asís, luz para una nueva
humanidad. Clara, iluminada por el Sol
Invencible. ¡Clara, en ti resplandece la
Nueva Alianza! Clara, has cultivado la
vida plena, en la armonía de las
bienaventuranzas, Clara, ¡Clara!
Queridas Hermanas Clarisas Capuchinas del Monasterio de la Santísima Trinidad de Santiago y del Monasterio Santa Clara de Pucón. Mis queridos hermanos de la Delegación San Francisco de Asís de Chile, mis Hermanos vocacionables y toda la Familia Francisclariana: laicos y laicas capuchinos y OFS, jóvenes capuchinos y Jufra, y todo el pueblo de Dios simpatizante de este hermoso carisma, ¡deseo que el Señor siempre nos dé su paz!
En este día de fiesta elevamos nuestro corazón en gratitud a Dios por la vida luminosa de Santa Clara de Asís, mujer de valentía, humildad y esperanza. Su existencia sencilla y radicalmente entregada a Cristo sigue inspirando al mundo con el testimonio de una fe que no se deja abatir ante las dificultades.
Santa Clara nos recuerda que la verdadera riqueza no está en los bienes materiales, sino en vivir plenamente confiados en la Providencia de Dios. Su vida contemplativa, marcada por el silencio, la oración y la fraternidad, es una invitación a redescubrir lo esencial la presencia amorosa de Cristo que llena todo nuestro ser.
Mis hermanos y hermanas, celebrar a Santa Clara de Asís en nuestros días, más de 800 años, es, de algún modo, redescubrir una luz que sigue brillando con suavidad y firmeza, incluso después de tantos siglos. Ella no fue solamente “la discípula de Francisco”, sino una mujer que, con una fe inquebrantable y una rara valentía, supo abrir caminos propios en el seguimiento de Cristo. Clara entendió que la verdadera riqueza no está en lo que poseemos, sino en el espacio que dejamos para que Dios actúe en nosotros. Su “pobreza” no era miseria, sino libertad: no
depender de nada que ate el corazón e impida el amor.
En nuestros tiempos, esto nos desafía a vivir con sencillez y a cuestionar el consumo que nos esclaviza. Clara llamaba a Jesús “el Espejo” en el cual debemos mirarnos. Esto significa buscar en Él nuestra identidad y no en las apariencias ni en las opiniones ajenas. Nos recuerda que el cristiano está llamado a moldear su vida a partir de Cristo, y no de las modas pasajeras.
En una época en la que las mujeres eran casi invisibles en la vida pública y eclesial, Clara fundó, dirigió y defendió con firmeza el modo de vida de las Hermanas Pobres. Esto nos inspira a valorar la voz de las mujeres en la Iglesia y en la sociedad, como constructoras de comunión y testigos de esperanza. Incluso enferma, Clara irradiaba paz y guiaba a su comunidad. Nos muestra que la fragilidad humana no es un obstáculo para servir, sino que puede ser un lugar de mayor entrega y confianza en Dios. Clara vivió en la clausura, pero tenía un corazón universal. Su alegría no provenía de “hacer muchas cosas”, sino de pertenecer enteramente a Cristo. Esto nos recuerda que la verdadera felicidad no depende del tener o del hacer, sino del ser y del amar.
Hermanos y hermanas, este año celebramos la Fiesta de Santa Clara de Asís en el marco del Año Jubilar de la Esperanza. Es una ocasión especial para dejarnos iluminar por su ejemplo de fe, pobreza evangélica y alegría, y para renovar nuestra confianza en Cristo, nuestra verdadera esperanza. Este Año Jubilar nos invita a renovar nuestro compromiso de vivir con alegría la pobreza evangélica, la fraternidad y la entrega total al Señor, tal como lo hizo Santa Clara. En tiempos de incertidumbre, su testimonio nos alienta a mantener la mirada fija en Cristo, nuestro verdadero espejo y fuente de esperanza.
Que esta celebración nos impulse a ser portadores de esperanza para nuestras fraternidades, comunidad y el mundo, irradiando la luz del amor de Dios a todos los que nos rodean. Sigamos el ejemplo de Santa Clara, caminando con valentía y alegría en la fe, confiando siempre en la misericordia y fidelidad de nuestro Padre. Que la paz y la esperanza de Cristo resplandezcan en cada uno de nosotros y en toda nuestra familia francisclariana.
Fraternalmente,
Hermano Mauricio Silva dos Anjos, OFMCap.
Delegado Provincial
De la Fraternidad Santa Cruz de Pucón
10 de agosto de 2025.