Nuestros jóvenes capuchinos han iniciado un profundo encuentro de fe, siguiendo las huellas del Pobre de Asís. En este espacio de fraternidad y comunión, están viviendo una experiencia increíble de crecimiento espiritual y descubrimiento del carisma franciscano.



Hoy, nuestros jóvenes han comenzado su día en oración, constituyendo fraternidades para experimentar la vida fraterna y menor que caracteriza a los hermanos capuchinos. Están reconociendo el valor y la preciosidad de vivir como hermanos, compartiendo sus vidas y promoviendo la alegría franciscana.
Durante este fin de semana, nuestros jóvenes estarán profundizando en su fe y vocación, conociendo más sobre el amor de Dios y la alegría que brota de las huellas de San Francisco de Asís. Pidamos al Señor que ilumine y conduzca este encuentro, para que nuestros jóvenes sean transformados por esta experiencia y puedan llevar la luz de la fe a todos los rincones de su vida.
Que la paz y la alegría franciscana estén presentes en cada momento de este encuentro. Paz y Bien!



